luna plateada capitulo 7

Whao vaya historia ¿Cómo podrían haber salido bien parados de aquella situación? No me cabía en la cabeza, luego recordé que ella había dicho que era vampira, y un escalofrío envolvió mi cuerpo, quizá me llamareis cagueta y desconfiado pero uno no se acostumbra de la noche a la mañana a la existencia de criaturas mágicas y acepta que la chica que a uno le gusta es precisamente una de ellas. Además que la he conocido hoy!!! Hoy? Joder que lento ha pasado el tiempo me ha parecido que desde que me levantado hasta ahora haya pasado muchísimo más tiempo…


- Ehh Anna ummm puedes ser más breve es que esto afecta a Carlos y está siendo muy incómodo para el- dijo Eli.

- Si, Carlos sé que esto para ti es más difícil de asumir que para los demás pero tienes que escucharlo todo, créeme no te lo diría sino supiese que no decírtelo no hace las cosas más fáciles. Por favor escúchame sé que es difícil pero mira en tu interior y atrapa todo tu valor. Ok?

- El problema no es que no tenga valor es que no me lo acabo de creer, es solo que lo que dices no tiene sentido, ni por asomo…

- Ya, esta es una de las maneras k pensaba que podrías reaccionar. Haber ehh como te puedo convencer…

- No necesito que me convenza nadie ya se pensar por mi mismo- gritó Carlos

- Ehhh bueno con las calmas Carlos, que te cuesta escucharla!! - le dije

- Tú te crees todo lo que ella está contando!!! Desde cuándo eres tan ingenuo?, ahhh ya se desde que ha venido la cacho tía esta, pero no ves que pasa ahh no claro como el señorito se ha enamorado…

Me vinieron ganas de pegarle una buena hostia para que se le bajaran un poco los humos, pero en una parte le entendía el participaba en esta historia de lleno y su mente hacia todo lo posible para negarlo. Así que en vez de darle un buen sopapo me serené y dije

- Entonces cómo explicas que todo se haya vuelto plateado, Ehhh?

- Y yo que sé , pero que más da se ha vuelto plateado, si y k pasa

- Qué qué pasa? Y donde está ese Carlos que decía: ¿qué nos pensabas dejar tirados con la anfibio? Le dije

- Ya parad. Me está dando dolor de cabeza- dijo Eli

- Y con razón -dijo Anna- ya esta tengo una idea os voy a ceder una parte de mi memoria así podréis creerme

- Y si no quiero que me los ense… pero se quedó callado

Le iba a preguntar que le había pasado cuando de repente una ola de imágenes me vinieron a la cabeza… ahora estaba en los recuerdos de Anna, en definitiva yo era Anna

Todo lo que vino a partir entonces pasó muy rápido intente zafarme del abrazo del vampiro pero era completamente imposible. Recuerdo gritos a mí alrededor y un agudo y punzante dolor en el cuello. Poco a poco se fue oscureciendo mi visión sabia que me iba a morir pero era una muerte, tranquila en paz, indolora… cuando pensaba que ya tenía un pie en la tumba sentí un cosquilleo por todo mi cuerpo seguido por un fuerte dolor de cabeza y en el pecho. Por qué no podía haber muerto? , el dolor era insoportable insufrible. Cante el aleluya cuando poco a poco el dolor fue disminuyendo hasta que cesó completamente. Abrí los ojos y sentí un aire fresco sobre mi cara, seguido de un fuerte resplandor plateado que cegó mi vista…

En ese momento oí de nuevo los ruidos a mí alrededor, y únicamente me vino una palabra a la mente “Carlos”.

Corrí, pero no a velocidad humana sino muy muy deprisa, nunca creí que se pudiera ir a tal velocidad. En menos de un segundo me encontraba en el callejón sin salida de por detrás de mi casa, donde había escuchado los gritos.

Ante mi se encontraban tres hombres peleando, era algo extremadamente mágico, en una palabra era Alucinante! En el espacio vacío entre los dos grupos había dos tipos de… no se… rayos de energía ? Uno se le podría decir que era un rayo bueno, lleno de luz, el otro por el contrario era un manto de sombras que intentaba quitarle el poder a la poderosa luz…



Los vampiros estaban ganando la partida y poco a poco el rayo de luz, se fue apagando quedando eclipsado por el rayo oscuro. El hombre que sostenía el rayo de luz se cayó de rodillas. Sentí una rabia como nunca la había sentido. Fue entonces cuando sentí una corriente eléctrica bajando por mis brazos hasta la punta de mis dedos. Baje mi mirada hacia ellas y vi como de ellos salía una rayos de color plata. Acumulando toda la ira y desesperación que guardaba en mi interior lance mi rayo en forma de espiral hacia ellos obligándolos a doblegarse e irse de allí. Solo podía pensar en que se fueran de aquí para poder encontrar a Carlos y ponerlo a salvo. Por fin mi rayo plateado acabó con los asquerosos vampiros, si ya sé que es lo que yo ahora soy uno pero ni por asomo me iba a volver una salvaje. Se fueron los seguí con todos mis sentidos al acecho y cuando ya estuve completamente segura de que ya está bien lejos y te Carlos grite:

- Carlos donde estas! Carlos!