The kill kiss capitulo 17

-Hueles muy bien-dijo y luego poso las manos en mi cintura y me acerco a él. Después me abrazo fuerte mente-te eh buscado por mucho tiempo y ahora te tengo-yo no sabía qué hacer. Ya sabía que me estaba buscando y desde mi nacimiento donde mis padres murieron creo que el comprendía ese sentimiento ellos eran sus amigos y nadie lo ayudo cuando murieron solo él estuvo ahí no les delato su amor. Tal vez el en ese momento necesitaba a alguien, a alguien a quien abrazar como lo está asiendo ahora conmigo, como yo necesito un abrazo en estos momentos en los que eh descubierto la verdad, en que mis madres murieron en lo que soy en mi origen, y nadie me ha preguntado como estoy, como me siento, un consuelo, una palabra de que todo va a estar, y este abrazo es como que me dieran todo eso y más porque lo necesitaba, lo necesitaba mucho demasiado. Lo abrase muy fuerte y empecé a llorar ya no lo resistía eran demasiadas cosas para mí.
-No llores.-me dijo.- ve a cambiarte.-hice lo que me dijo agarre mi pijama y fui al baño para ponérmela. Mi piyama era un pequeño short y una blusa de tirante morada. Me vi en el espejo tenía los ojos rojos por llorar me limpie las lagrimas y salí. Ángel seguía parado en el mismo lugar. Se volteo a verme. Me miraba de arriba hacia abajo y de abajo hacia arriba. Me sonroje mucho y él lo noto así que volteo hacia otro lado. Yo no pude aguantar las ganas y otra vez empecé a llorar. Ángel volteo a verme de nuevo y dijo:
-No, no llores.-dijo como queriéndose acercar a mí y como que no. Decidió acercarse y abrazarme yo también lo abrace. No sé cuánto tiempo pasamos así, yo ya avía dejado de llorar pero nos seguíamos abrazando. Ángel en un momento me cargo se sentó en la cama y con una mano la distendió luego me puso en la cama y me arropo.
-Ya estás bien ¿te sientes bien? ¿Quieres algo?-me pregunto con la voz más dulce que avía escuchado en mi vida.
-Si ya estoy bien, me siento bien solo que es muy no sé cómo decirlo pero es muy complicado para mí todo esto saberlo de la noche a la mañana.
-Si lo comprendo
-Y no gracias no necesito nada creo que debo descansar.
-Si
-¿Ángel?
-mmm
-Ciento a verme comportado así en el auto no era mi intención
-No, tú no tienes la culpa yo me desespere muy rápido. Debí esperar que lo dijeras que dijeras que veías en mí.
-aja-dije bostezando.
-mejor duerme. Buenas noches.-dijo besando mi frente como lo asían los padres cuando querían que sus hijos ya se durmieran.
-Buenas noches.-dije y cerré los ojos.-Ángel-dije.
-SI-Dijo y yo abrí los ojos. El estaba al frente de mi cama.
-Acércate-dije y el se movió a lado de mis pies-acércate mas-se movió hasta mi lado pero aun seguía parado y con cara de con fusión-arrodíllate-le dije. Por lo visto tenía que decirle paso por paso lo que tenía que hacer.- acércate mas- se acerco un poco. “así nunca acabaremos” pensé. Puse mi mano en su nuca y lo acerque a mí hasta que mis labios quedaron cerca de su oreja- lo que vi en tus ojos es-dije y después me aleje viendo eso ojos amarrillos tan hermosos y confundidos.-vi- dije y acaricie su rostro. Sé que estaba medio dormida pero ese no era el caso sabía perfectamente lo que asía. Pero mañana podía decir que estaba demasiado dormida. Acaricie toda su cara, su frente, sus orejas, pase mi dedo por sus ojos su nariz, su mentón, su cabello.- vi- volví a repetir. Y acaricie sus labios y viendo lo a los ojos dije:
-vi o triste y solo que estas. Descubrí que tienes un secreto y que no me lo rebelaras.-dije- aun.- agregue. Y acaricie por última vez su mejilla y caí profundamente dormida.
Desperté a la mañana siguiente recordando cómo se sentía su piel. Sonreí. Me senté en la cama y pude ver que Ángel seguía en la habitación sentado en unos de los sillones blancos recargando la cabeza en el sillón con los ojos serrados. Sabía que no estaba dormido, el me había dicho que no podía dormir, entonces debe estar tan metido en su cabeza que no me avía sentido. Me levante cuidadosamente de la cama tratando de no hacer nada de ruido y me acerque hasta el recordé que el avía dicho que olía muy bien me pregunte como debo de oler y más me pregunte a que olía el me puse atrás de él y hacer que mi nariz a su cabello, olía a chocolate, menta y otro olor que no pude reconocer pero olía exquisito, el rápidamente se levanto del sillón y se voleo asía mi con cara de sorprendido.
-Ella no te sentí.
-No claro que no ya me di cuenta que hubiera pasado si envés de ser yo hubiera sido alguien más como Karla me hubiera matado por meter a un hombre a mi habitación. ¿Y en que pensabas?- dije todo esto con una sonrisa en la cara, no podía dejar de sonreír y no sabía por qué.
-Bueno tienes razón tengo que ponerme más atento y no pienso en nada importante.
-A bueno.
-¡Ella!-grito Karla detrás de la puerta tocándola. Yo mire sorprendida a Ángel.-puedo pasar.
-Espera Karla-dije. Me acerque a Ángel y le agarre de la mano. Y lo jale hasta el baño, su contacto se sentía tan bien.-metete aquí horita se va-le susurre a Ángel. Y cerré la puerta del baño. Y fui a abrirle a Karla.
-Hija todavía no estás lista se te va a hacer muy tarde Ned ya está abajo esperándote.
-Tan tarde es. Dile Ned que no se preocupe que vaya por Lili, Ángel me llevara.
-Apero que reguero tienes aquí. Anda ve a bañarte yo arreglo tu cuarto.
-No tienes que molestarte.
-No es ninguna molestia anda báñate estoy segura que de todas formas vas a llegar tarde pero no tanto apúrate.- sabía que no podía decir que no a Karla eso lo aprendí de ella. Así que agarre mi ropa y me metí al baño. Ángel estaba ahí. Mirándome.- Cuando ella dice algo es así.-conteste a su mirada. Suspire.
-No escucho la regadera, Ella.-grito Karla.
-Te tendrás que bañar.-dijo Ángel.-Se te va a hacer tarde además tenemos que pasar a que me cambie. Así que apúrate.
-No me desvestiré enfrente de ti.
-Pues mete te a la regadera.-hice una mueca de disgusto y él me sonrió. No podía competir con esa sonrisa. Di un suspiro de derrota y el sonrió mas. Me metí a la regadera y puse la cortina. Me empecé a desvestir cada ropa que me quitaba la aventaba hacia fuera cuando llego l momento de quitarme la ropa interior me sonroje, sabía que él estaba afuera y que Karla seguía ordenando mi habitación y que no podía sacar a Ángel del cuarto de baño, y avente mi ropa junto a la de los demás. Abrí el agua y sentí como me relajaba.
-¿No vas a cantar?- pregunto Ángel.
-No canto en el baño-le respondí.
-¿Por qué no?
-No creo que cante muy bien.
-No, enserio haber canta algo.
-No
-por favor. –Suspire otra vez y empecé a cantar mi entras me bañaba. Cuando termino la canción se escucharon aplausos, yo estaba roja como tomate estaba segura no me gustaba cantar enfrente de los demás.
-Cantas como los Ángeles-dijo Ángel.
-Creo que eso es un cumplido. ¿Viniendo de ti?
-Yo puedo dar cumplidos. Si se los merecen.-dijo cuando avía terminado de bañarme, cerré la regadera.
-Me puedes pasar una toalla, por favor-dije.
-Si-dijo y luego sentí la toalla. Me la puse. Y salí Ángel me miraba de arriba hacia abajo y de regreso “que nunca terminaría esto” pensé y me sonroje.
-Ella ya termine de arreglar la habitación apúrate.-dijo y se escucho como cerraba la puerta. Pero Ángel me seguía mirando.
-Ángel…ya te puedes…salir-tartamudee un poco porque me ponía muy nerviosa cuando me miraba así. Solo asintió y salió. Yo termine de vestí me y salí. Salí del cuarto de baño y me dirigí al espejo agarre el cepillo y me cepille el cabello.
-Deja que yo lo haga.-mire a Ángel por el espejo.- por favor déjame hacerlo. Eso me hace recordar cuando peinaba a mi hermana pequeña cuando era humano.-dijo extendiendo la mano para que yo le entregara el cepillo y así lo hice, se lo entregue.- siéntate en la cama.-me senté y empezó a cepillarme. Me gusto que lo hiciera.
-Ya termine.
-Gracias-dije tomando el cepillo de sus manos. Y yendo otra vez hacia el espejo para maquillarme. Me puse delineador negro, que con binaba con mi topa de hoy convers negros, pantalón de mezclilla oscuro, una blusa blanca con el signo de amor y paz, un chaleco negro, y un poco de brillo labial. Mientras me ponía el brillo Ángel dijo:
-¿Por qué vez eso en mis ojos?- me sorprendió su pregunta y deje de ponerme brillo.- ¿Por qué me acariciabas la cara cuando lo decías? ¿Por qué lo hacías con esa voz tan dulce?-me quede estática mirándolo por el espejo mientras decía eso. Yo desvié la mirada y dije:
-No sé de que hablas.-cuando me di cuenta Ángel ya me estaba volteando hacia a él.
-No me mientas yo te vi.
-Estaba muy dormida.
-No, no me vengas con ese cuento yo te vi estabas despierta vi con la ternura que me mirabas. Me tienes lastima ¿verdad?
-No como crees. Yo no te tengo lastima, te….- no, no yo no puedo quererlo, no puedo enamorarme de él. Pero yo… no se estoy confundida ya no sé nada está muy cerca de mi ayer pude controlarme porque mi cuerpo estaba débil. Pero ahora estaba muy cerca de mí.
-¿Tú qué?
-yo… te lo diré en tu casa sino nos vamos Karla me matara.- asintió y se alejo de mi. Salí rápidamente del cuarto cuando escucho que tocaban el timbre. Escuche como abrían la puerta supuse que Karla la había abierto. Cuando baje las escaleras vi que era Ángel quien había tocado el timbre.
-Hola- salude como si no lo hubiera visto hace un segundo.
-Hola ya vámonos. Fue un placer verte de nuevo Karla. Anda vamos apúrate.-si que este hombre cambiaba de humor muy rápido. Dijo y camino hacia su auto. Yo me acerque a la puerta.
-Adiós.-me despedí de Karla.
-Sí que cambia muy rápido de humor ¿no?, hija. Debe de agradarte mucho yo lo sé lo conozco no mucho pero sí y sé que es de las personas que te agradan su forma de ser no le importa nada.- mire a Ángel que seguía caminando y voltee hacia Karla y asentí.- Adiós, hija. Yo corrí hasta llegar a lado de Ángel. Nos metimos al auto y Ángel manejo hacia su casa. Vi por el retrovisor que Arthur nos seguía. Llegamos a su casa y salimos del coche. Arthur también se estaciono y salió del auto.
-Buenos días-le salude
-Buenos días.
Entramos a la casa y seguí a Ángel a su habitación. Me senté en la cama y observe que se metía al cuarto de baño. Después de unos minutos salió con una toalla en la cintura y el pelo mojado, se veía tan sexy, reprimí un suspiro. Sin su camisa se veía tan musculoso quise ver como se sentían mis manos en ese torso y brazos, reprimí otro suspiro, tenía que salir de ahí. Y así lo hice camina hasta llegar a la sala, no me senté me quede parada junto al sillón. Y espere ahí hasta que Ángel apareció por el pasillo tan sexy como siempre. Y se paro al inicio de la sala y se recargo en la pared.
-Ahora contestaras a mis preguntas.- yo asentí.- primero que todo ¿es cierto lo que dijo Karla? ¿Te agrado?
-Si claro me gusta tu actitud y Karla lo sabe muy bien.
-¿entonces en verdad vez soledad en mis ojos? ¿Me tienes lastima? ¿Por qué me acariciabas la cara? ¿Por qué lo decías con voz dulce? ¿Por qué me mirabas con ternura?
-Si veo soledad en tus ojos, y no, claro que no te tengo lastima más bien…te respeto, y pues…seré sincera quería acariciar tui cara, ni siquiera me avía dado cuenta que lo decía con voz dulce y lo de lo que te miraba tampoco.
-Así que querías acariciar mi rostro y supongo que ¿también querías oler mi cabello?
-Si
-¿Y por qué?- dijo acercándose a mi.- ¿por qué haces todo eso?-dijo acercando semas a mi hasta estar a un paso de distancia.
-Por que yo….-no pude resistir mas y di ese paso que nos separaba quería besar lo yo, yo no mi instinto para matar, agarre su cara entre mis manos y lo bese moviendo mis labios en sima de los suyos el estaba estático no se movía y yo seguía besándolo otra se hubiera separado cuando la rechazaran pero yo quería que me respondiera que moviera sus labios con los míos. Y así fue me agarro por la cintura y me acerco mas a él y movió sus labios junto a los míos fundiéndonos en ese beso tan apasionado, juntando nuestros cuerpos, juntando nuestras lenguas. Entregándonos por completo. Ángel hizo que camináramos hacia atrás hasta topar con el sillón y caímos en el. Seguíamos besando hasta que se escucho el timbre y tocaron la puerta, no le hicimos caso y nos seguimos besando hasta que Arthur grito:
-Ella ¿estás bien? Ya es tarde.-Me separe un poco de Ángel y le dijo:
-Sí, ya casi vamos-y volví a besar a Ángel. El se separo de mí y eso ocasiono que hiciera un puchero. El me sonrió y me extendió su mano para que me parara, la tome me arregle un poco el cabello y la blusa, y fuimos hacia la puerta. Cuando aria la puerta Ángel la detuvo y me beso él seguía estando sonriente, yo le sonreí y salimos de la casa Arthur estaba enfrente de la casa dando vueltas me reí y Ángel también. Arthur se detuvo y nos miro, más que a mi miro a Ángel.
-No te desesperes-le dije-no me va pasar nada en la casa de Ángel y Ángel no me hará nada, En eso estoy completamente segura. Creo que tendré que mucho trabajo contigo.
-¿trabajo?
-Sí, necesitas ser más relajado. Y empezamos así si no te relajas tendré que escaparme y me perderás de vista, y tú no quieres perderme de vista ¿verdad?
-Sí, sí está bien.
-Ya vámonos-dijo Ángel- no podremos entrar a la segunda clase tampoco ya es muy tarde.
-Si
Nos dirigimos al auto, Ángel se adelanto a mí para abrirme la puerta. Me subí y el también. Arranco el coche y pregunto:
-¿Por qué me besaste?
-¿Por qué correspondiste el beso?
-No cambies el tema.
-Te bese `por que quería hacerlo, y por lo visto mi poder no te afecta por que ya eres un vampiro. Bueno eso es una teoría mía-
-Te correspondí el beso porque quería. Ella sabes que tienes novio….
-Si lo sé pero yo no quiero a Ned de esa forma y se lo diré en la fiesta de Lili por supuesto estas invitado y Alexander también, que se dé una escapada de esas oficinas.
-¿Sabes que trabaja en una oficina?
-Claro, quien no sabría quien es Alexander Von el gran empresario y millonario. La familia Von es famosa y deben ser vampiros ¿no?
-Si
-Bueno que valla nadie lo reconocerá es de disfraces la fiesta. Pero tú puedes ir así. Solo saca tus colmillitos y ya.
-jajaja lo tomare en cuenta-yo me reí también y llegamos a la escuela como había dicho Ángel las clases ya avían comenzado así que nos sentamos enfrente de un árbol a platicar. Me conto que era más viejo que Alexander y mi papá juntos, que su color favorito era el violeta y el negro. El negro no me había sorprendido pero el violeta.
-¿Por qué te gusta el violeta? – el volteo hacia Arthur que estaba en una banca mirándonos parresia sorprendido. Ángel se acerco a mi oreja y me susurro:
-Porque es el color de tus ojos-su aliento en mi oreja ocasiono que me estremeciera y me pusiera roja. Nadie me avía dicho algo así tan lindo. Bueno yo soy exagerada siempre pienso eso cuando alguien me dice algo lindo. Le sonreí y el a mi escuchamos que tocaban el timbre y nos paramos.
-Nos vemos luego Arthur.-dije despidiéndome con la mano.
-Si estaré aquí.
Nos dirigimos hacia la escuela y nos metimos a la clase de español, que tenia con Ned. Y por supuesto me lo encontré, me dijo que por qué no dejo que la esperara y conteste que se mi hizo tarde y que no podía esperarme porque íbamos a recoger tarde a Lili. Después llego el maestro yo me senté atrás con Ángel y eso pareció molestarle a Ned eso era lo malo de Ned era muy celoso y esta vez sí tenía razones para estarlo. Porque me encantaba Ángel me estaba enamorando de él y yo quería enamorarme de él seme hacia una persona con carácter pero también puede ser dulce, es misterioso pero divertido no me avía reído tanto con el que con cual quiera en años, también decía las cosas como son no le importaba tratarme mal en frente de quien me crio o tratarme bien enfrente de las personas. Y era guapo recordaba su torso desnudo y su cabello mojado se veía tan sexy. Suspire.
-¿Por qué suspiras?-pregunto Ángel con una sonrisa. Yo me sonroje. Y negué con la cabeza.-Esta bien lo único que sé es que debe ser algo bueno. Nadie suspira con esa sonrisa por algo malo.
-Sí, si es muy bueno.- volví a suspirar este hombre me ropa todos mis suspiros con solo recordar su cuerpos, sus manos en mi cintura, sus labios en los míos ese beso fue el mejor de todos nuestro primer beso. Suspire de nuevo.
-Señorita Ella podría dejar de interrumpir la clase con sus suspiros o nos quiere contar que la trae así.- dijo la maestra Andrea la maestra de español que a cada rato me molestaba.
-No, maestra por favor continúe con su clase-dije
-Muy bien muchachos continuemos, les explicaba que…..-y así pasaron las clases yo suspirando sin cesar y sentada en todas las clases junto a Ángel hasta que llego el almuerzo. Nos dirigimos hacia donde estaba Edward, Lili Y Ned cuando vi que Marcela se dirigía a nosotros, más bien a Ángel. Hice una mueca de disgusto, Ángel la noto y me pregunto qué me pasaba.
-Me pasa ella.-dije señalando con la cabeza a Marcela que estaba más cerca de nosotros.
-¿Estas celosa?-dijo levantando una sega y con una sonrisa divertida.
-Yo… no claro que no.-se rio de mi mentira. En ese momento Marcela llego a nosotros.
-Hola Ángel.-dijo con coquetería.

les deseo QUE ESTE año SE La PASEN muy BIEN!!!!!!!!!!

2 comentarios:

  1. xuliiiiisimoo!! wau x fin se besan jejeje estaba deseando leer este capitulo =D un beso y sigue asi me encanta esta historia xDD

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  2. me encanta juro que amo a ANGEL!!
    que corte luego con Ned... es mejor tenerlo de amigo jajaja!
    bueno me hago tu seguidora por qe me encanto tu historia...
    besiitos!

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