Dulce Tentación Capitulo 8



Estuve muy inquieta durante el resto de la noche. Apenas pude dormir. Cuando sonó el despertador, fui la primera en levantarme. Me metí en la ducha, y pase allí un buen rato, pensando, relajándome… ¿En que me había equivocado? Otra vez volvemos a las preguntas sin respuestas…


Cuando al final tome una decisión sobre que hacer, salí de la ducha y enrolle una toalla alrededor de mi cuerpo. Las chicas ya no se encontraban en sus camas, se habían marchado. ¿Sin ducharse? ¿Tan rápido? Que extraño-pensé. Pero no le di más importancia al asunto. Me dirigí al armario para coger la ropa. Busqué una minifalda vaquera que nunca había tenido la oportunidad de estrenar. La cogí y debajo me encontré con mi portátil. ¿Pero cómo? Yo juraría que...Comencé a juntar todas las piezas, y solo me daba un resultado...una de mis amigas era una traidora, me había estado engañado durante todo este tiempo, quería destruirme… hasta puede que las dos sean…pero Claire…no creo que Claire sepa algo, siempre ha sido tan buena amiga, tan inocente…y Anny igual, puede ser que este un poco loca, pero para llegar hasta este punto, no la veo…Mil cosas pasaban por mi cabeza. Yo que siempre he estado diciendo que no te puedes fiar ni de tu propia sombra…y ahora…todo esto me pasa por querer tener amigas… ¿algún día encontrare realmente a alguien en que pueda confiar? Ya se que yo no les he contado nada, pero ha sido por su bien. Yo pensaba que ellas eran buenas…quizás si lo son…pero descubriré quien se ha estado metiendo en mi camino…

Salí de mi habitación y me fui a desayunar. Vi a Claire y Anny hablando animadamente en nuestra mesa de siempre. Yo en cambio de ir con ellas, me fui a sentarme sola en una mesa apartada. Eso seria una manera de que la culpable notara que ya sospecho algo y que podría desmontarle sus planes. Ellas me miraron, y se extrañaron, me hicieron señas para que fuera hacia allí, pero yo negué con gesto rápido y preciso. Dos minutos después levante la vista y me encontré con Taylor sentado delante de mi.

-¿Se puede saber que haces aquí?

-Desayunar. Es lo que hace la gente normalmente ha estas horas.

-¿Y lo tienes que hacer en esta mesa? Hay 50 más en las que te puedes sentar. Enserio, Tay, no estoy de humor. Déjame sola.

-Bueno, este lugar esta libre, y me gusta.-le mire, suplicándole, pero no sirvió de nada- ¿Qué ocurre? ¿Te has peleado con tus amigas?

-Whau! Hasta ya te estas pareciendo a un profesor…-silencio- si, ya se que no ha tenido gracia, ya te he dicho que no estoy de humor. Cuando recargue las pilas, te aviso y te vuelvo a molestar.

-No has contestado a mi pregunta. Te lo vuelvo a repetir, puedes confiar en mí. Estoy aquí para lo que necesites.

Mire de reojo a mis amigas y comencé a reírme ¿Confiar? ¿Confianza? ¿Qué es eso?

- No, no me he peleado con mis amigas, simplemente me apetecía estar sola. ¿Para lo que necesites? El otro día necesitaba acabar lo que habíamos empezado y tu…


-Rose, yo…..aah. Te veo apagada. No me gusta verte así, Rose…

¡Míralo que listo! Que bien sabe cambiar de tema.


-Pues si no te gusto, no me mires y lárgate. ¿Sabias que el 90% de las chicas/mujeres de este internado mueren por pasar contigo una noche? Hasta con unos cuantos minutos se conformarían. Así que no tienes ningún problema. Tienes para elegir.- hice ademán de levantarme, pero Taylor me agarro la mano y me hizo volver asentarme.

- ¡Pero mira que te gusta irte siempre para al lado equivocado! Tu y tus historias. Enserio, tienes una rapidez para sacar tus teorías, incluso para ponerlas en practica. Si sigues así serás capaz de escribir una novela en menos de una semana…Rose, no me interesa ese 90% exagerado, todo este tiempo solo una única persona ha sido mi mayor preocupación, incluso por delante de mi mismo. Esa persona eres tú, Rose. Si, tengo que reconocerlo, me cuesta decirlo. No soy perfecto. Pero las cosas están así y creo que debes saberlo. Ahora estamos bien con todo este royo juguetón que nos hemos montado. Pero llegara un momento en que nos tendremos que poner serios y ver lo que realmente queremos.

-¿Y tu que quieres?- pregunte en un susurro.


-Yo te q…-Mierda! Comenzó a sonar mi móvil y Tay se callo Espero a que contestara.

-Ahh, hola Jes…- mire a Taylor y recordé que no podía hablar tan abiertamente.-Jason, cuanto tiempo...


-¿Jason?, Bueno da igual. Rose, solo te llamaba para ver que tal te iba…

-Muy bien. Sabes aun no he podido descubrir nada sobre lo que me pediste. Ya sabes, el animal marino ese tan raro. Te puedes creer que tan despistada soy, que de repente no encuentro mi portátil y a la mañana siguiente lo encuentro así sin más…si es que vaya cabecita que tengo…- Taylor no me quitaba la mirada de encima. Se le notaba que se esforzaba por entender algo.

-Oh! Ya entiendo estas con alguien. Bueno tranquila, te ayudare con todo esto. Es muy duro para una sola persona.


-Gracias. Sabes, dentro de unos días, mi amiga Anny da una fiesta. Te apuntas…por favor…te necesito…


- Ahh, ok! Nos vemos entonces. Ya me avisaras de la hora y el lugar. Suerte, Rose. Bye, cuídate guapa.


- Bueno, siento la interrupción. Un amigo. ¿Que me ibas a decir?


-Ehh, se me ha olvidado. Si es que vaya cabecita la mía…porque la llevo cogida, porque si no también la perdería…


Sonreí. Él sonrío. Si no fuera porque esto esta petado de gente, me levantaría y le besaría.

- Yo también- dijo Taylor. Yo le mire confusa. De repente me di cuenta de que me había quedado mirando descaradamente sus labios y sonriendo aun más.

- ¿Recuerdas lo que te dije ayer? Nada de besos. Eso te pasa por dejarme a medias. La próxima vez te lo piensas mejor.

-¿Y tu recuerdas que se me ocurriría algo para convencerte?


-No te va a servir…


- Ya veremos. Creo que ni siquiera me va hacer falta utilizar algún plan.


-¿Tan seguro estas de ello?


-¿Quieres que lo comprobemos?- dios mío! Como siga así, es que lo cojo y no lo suelto…


- Por mi esta bien…pero el que esta cayendo eres tu no yo…

- Me da igual, no soy tan orgulloso. Mientras consiga lo que quiero.

- ¿Y que quieres?

- ¿Aun no lo sabes?- me guiño un ojo y a continuación me mostró su sonrisa más sexy. Suspire. Me levante y el hizo lo mismo.

Cuando estábamos de camino al gym donde él tenía su primera clase, en momento, se quedo atrás y silbo.

- Sexy! Muy sexy! No te voy a decir que me acabo de fijar, porque seria mentira. Pero ahora que me fijo más, whau!

- Me alegro de que te gusten mis zapatos-dije de broma.

-¿Los zapatos? No es la ropa lo que me gusta. Aunque si te sigues poniendo cosas así yo no respondo de mis actos-dijo- Me gusta todo. Me gusta Rose.

- ¡Oh! Acabas de sonar como un niño pequeño. Que mono.”Me gusta Rose”- no podía parar de reírme. De repente atrapo mi boca con la suya, nos fundimos en un beso súper caliente y húmedo, mientras que él acariciaba mis muslos con sus fuertes, pero suaves manos. No había puesto ninguna resistencia, lo estaba deseando.

- Veo que el niño pequeño aprende muy rápido.

-Mmmm, no es lo único que se hacer, si quieres te puedo enseñar otros temas más avanzados-me susurro al oído-Pero solo porque eres tú.

-Ok.¿Cuando decías que empezaban esas clases avanzadas?- las carcajadas de Taylor se oyeron por todo el pasillo.

-Ahora mismo, pero solo si tu quieres- susurro, y después comenzó a besar mi cuello. Yo gemí y asentí a la misma vez.

-Ejem-alguien se aclaro la garganta y nos separamos.

-Ahora entiendo porque me pegaste. Estas liado con ella. Rose jamás pensé que tu fueras de las chicas que follan con sus profesores.- cuando vi que Taylor se iba a lanzar, lo agarre como pude y lo eche para atrás.

-Taylor, nos vemos después. Tengo que hablar con él.


-¿Esperas que te deje aquí sola, con este gilipollas? Ni pensarlo.


- ¡Taylor!


- Esta bien. Pero estaré muy cerca. Mueves un dedo y te la arranco de cuajo. ¿Entendido?-dijo dirigiéndose a Mark.

Tay se marcho y nos quedamos solos.

- Bueno, por lo menos esta vez no hay armas de por medio.

-Si no me cuentas las verdad, si que las abran…

- Cuando tú me cuentes la tuya, yo te contare la mía. ¿Sabes? Te tengo calada desde el primer momento. Podrás engañar a todos pero a mi no.

- ¿Qué sabes? ¿Quien eres?


-Que casualidad, yo me preguntó lo mismo que tú.

- ¿Claire esta metida en todo esto?

-Interesante pregunta. Puede ser que si o puede ser que no. Aunque creo que ya sabes que estas rodeada de enemigos. ¿Y tú eres una profesional?..Empiezo a dudarlo… Hasta te has dejado engatusar por Tay…siempre utilizando el mismo método para capturar a sus victimas. ¿Te crees que eres la primera alumna en la que esta interesado? No, por supuesto que no. Muchas de tus compañeras de clase, seguro que ya han pasado por su cama.

- Ya se lo que estas haciendo. Estas intentando confundirme.

- No, nada eso. ¡Pobre ilusa! Capaz de que ya hasta te has enamorado de él…aunque él no es tu único problema. Niña te has querido meter en algo que te queda muy grande. Así que ahora tienes la oportunidad de marcharte…después será demasiado tarde.No trates de mentirte a ti misma. En el fondo sabes que lo que te digo es cierto….

-Mira, no voy a seguir perdiendo el tiempo contigo. Pero gracias por aliviarme. Por lo menos ahora se que no me equivoque contigo. Y yo que pensaba que eras una persona decente...

-Tu veras lo que haces…-dijo finalmente y se marchó.

***********************************************

Después de la conversación que tuve con Mark, Taylor volvió acercarse a mí. Le tranquilice, a mi manera, con unos cuantos besos y me marché. No iba a dejar que las estúpidas palabras de un idiota me afectaran.

Me pase toda la tarde hablando con Jesse. ¡Por fin alguien con el que desahogarse! Pero la llegada de Jesse no solo eran buenas noticias, también traía una mala. Si la cosa no mejoraba pronto, me vería atacada por ambos bandos. Por mis enemigos y por mis aliados.

Al caer la noche, no tuve más remedio que entrar a mi habitación. Anny se estaba haciendo la manicura y Claire estaba leyendo un libro en su cama.

- ¿Rose se puede saber que te pasa con nosotras? ¿Es por que no te hemos esperado esta mañana?-pregunto Claire

-Noo, chicas. Simplemente necesitaba estar sola. Solo eso.-dije rápidamente. Acababa de poner en marcha el plan de mi querido Jesse.

-Estábamos muy preocupadas. No queremos que haya mal royo entre nosotras.

-Por supuesto que no. Y además no hay ningún motivo para que lo haya, ¿no?

- Claro que no.

-Pues ya esta. Problema solucionado. Bueno… ¿qué os vais a poner este sábado?

*********************

En los siguientes días no hubo ninguna complicación. Pero el viernes por la noche comencé a sentirme muy mal. Empecé a pensar que nunca había estado segura en este lugar. Mientras dormía, cualquiera podría venir…y hacerme cualquier cosa, hasta matarme. Desde muy pequeña, me habían enseñado a no tener miedo, a saber defenderme…pero no se que me ocurrió, que el temor me llego de pleno. Hasta temblaba un poco. Estaba asustada. No me gustaba eso. Me sentía débil. Lo que hice esa noche, debería avergonzarme, pero necesitaba sentirme protegida. Recuperar mi fortaleza. Pero esta vez no podía hacerlo sola. A medianoche toque su puerta. Un Taylor medio dormido me abrió la puerta. Sorprendido, me dijo que pasara. Me acuno en sus brazos. Le conté sobre el miedo que tenía y él no comprendía. Según él no tenía nada que temer. Respire hondo.


- Tay…creo que debes saber unas cuantas cosas sobre mí y sobre lo que me rodea. Quizás no debería contártelo o quizás si…pero te lo contaré y después que pase lo que tenga que pasar…


♥Maria♥

1 comentario:

  1. Oh! que bien que por fin sabremos qué es nuestra querida Rose. Y para mí que la mala de la historia es esa Any, no me convence para nada...

    Espero el próximo capítulo, esto se pone cada vez mejor.

    Besos

    ResponderEliminar