luna plateada cap 13

Anna miró a su alrededor, de nuevo apareció aquella hermosa luz plateada, pero esta vez se dirigió amistosa hacia ellos arropándolos bajo un paraguas impermeable y fuerte.
- Muchísimas gracias mi señora- dijo Anna por los bajinis en modo de agradecimiento.
- Buenos manos a la hora!- dijo Carlos

Así que comenzaron a nadar protegidos por aquel paraguas plateado y comenzaron a atravesar el manto de energía que separaba las puertas sagradas al mundo mágico. Sintió unas cosquillas agradables por todo su cuerpo que le provocaron una agradable sensación hogareña, no había pisado nunca el mundo mágico pero sentía que pertenecía plenamente a él. No había planeado encontrarlo y menos aun entrar en él, pero así lo había querido aquel caprichoso y variable destino. No tenía ni idea que iba a pasar a partir de entonces, y eso contando con las predicciones de Marcus, pero se estaba dando cuenta que no le tocaba otro remedio, tenía que vivirlo tal y como se presentaba aprovechando los buenos momentos, vivir amando y siendo amada hasta el día de su muerte, tanto si fuera próxima o lejana. Después de ese pensamiento su mente se quedó en un estado de shock no pasaba nada era como si estuviera dormida sin soñar se quedo como si se le hubiese separado la conciencia de su cuerpo…



Poco a poco fue abriendo los ojos, y visualizo una laguna en calma idéntica a la del internado. Estábamos en el mundo mágico? Se preguntó. La repuesta le vino inmediata de nuevo con aquella agradable sensación de hogar y de calor. Carlos, Eli, Marcus y Javi estaban a su alrededor también empezando a retomar la consciencia. Bueno todos excepto Javi que aún seguía en aquel provocado sueño. Se estaba empezando a preguntar si había estado buena idea dejar dormir a Javi en vez de despertarlo. Pero lo echo, hecho estaba.



- Esto es el mundo mágico?- no lo parece, es de lo más normal- dijo Carlos



- Si bueno puede parecerlo pero es bastante diferente- dijo Marcus.- i ahora será mejor que nademos hacia la orilla y nos sequemos las ropas.



- Si eso estaría bien porque estoy congelada- dijo Eli tartamudeando.



En un minuto llegaron a la orilla se quedaron tumbados en la tierra, intentando de una vez descansar por fin del día que habían tenido. Pero eso no fue posible de repente su cuerpo se puso alerta y se levanto bruscamente. Marcus hizo lo mismo



- ¿Qué es lo que pasa ahora?- dijo Carlos



- Por la cara que ponen nada bueno- le contesto Eli abrazándose fuertemente Carlos.



De repente aparecieron en el horizonte del bosque un grupo de, ehh no sabía del todo como se llamarían pero no parecían para nada amigables, eran altos muy altos con la piel de color gris oscuro. Por suerte no eran muchos no superarían la media docena.



Marcus rápidamente miró a Anna con aquella mirada que le hacía saber lo que estaba pensando. Al saber el contenido de sus pensamientos, Marcus subió a Eli a su espalda y Anna hizo lo mismo con Carlos, que soltó un grito sorprendido por la fuerza de Anna, Javi no se movió del lado de Anna y la seguía por allá donde iba. Empezaron a correr a velocidad mágica hacia los lindes del bosque, Marcus comenzó a hablar



- Esos seres son cinereus, una de las especies más antiguas de este mundo, pero también las menos civilizadas y atrasadas, o lo eran al menos cuando yo vivía aquí hace 2000 años. Conocen casi mejor que la diosa estos terrenos pero no son muy mágicos, en eso nosotros tenemos ventajas.



- ¿Pero que quieren?- dijo Carlos



- Seguramente estarán enfadados porque hemos entrado en sus tierras y quieran destruirnos- le contestó Marcus



- Joder Carlos mejor que no hubieras abierto esa bocaza tuya, ahora estoy acojonada- dijo algo histérica Eli.



- Upps jeje, bueno tu recuerda lo que ha dicho Marcus, nosotros le ganamos en cuanto a magia y poderes.



- Eso espero- dijo Anna, pero a donde vamos?, porque vamos a algún lado no? O estamos corriendo sin rumbo fijo



- No eso sería una pérdida de tiempo, nos dirigimos hasta el fin de sus tierras para que nos dejen tranquilos. Hacia el horizonte, por esta dirección hay unos de los ríos más caudalosos de esta región ese río separa la zona de los cinereus y la culturizada de ángeles, vampiros, magos…



- Ahh jejej, y esa es la culturalizada?- dijo Carlos



- Piensa lo que dices hermanito, recuerda que Marcus y yo pertenecemos a ese grupo.- dijo Anna



- Jeje, lo siento, jeje me va costar acostumbrarme



- Tranquilo, solo era para aliviar la tensión y reír un rato



- Jejej pues a servido un poco- dijo Carlos



- ¡Anna!- dijo seriamente Marcus- ya concéntrate, necesito todos tus sentidos al máximo de su potencia, no podemos permitirnos distracciones



- Entendido mi general- dijo Anna riéndose pero al ver la mirada de Marcus se puso seria y se concentro al máximo en el menor signo de movimiento a su alrededor.



Pasaron como quince minutos sin el menor signo de movimiento, cuando oyó un siseo en la lejanía, rápidamente lo reconoció como el sonido del vuelo de una flecha, como siempre, ahora muy a menudo concentro su energía en la palma de sus manos y lanzo una bonitas llamas plateadas que chocaron contra la flecha y la diluyeron en el aire. A continuación vinieron muchísimas más flechas como esas que esquivaban por si solas los arboles para dar acertadamente en el blanco, es decir nosotros, Marcus se sumió a mi ayuda y entre los dos enviemos rayos y llamas hacia las flechas que se iban consumiendo en el camino. Los cireneus estaban furiosos no podían dar en el blanco y empezaron a lanzar flechas sin ton ni son. Una flecha paso rozando a Javi pero gracias a los reflejos de Anna consiguió alejarla con un potente rayo,



- Mirad el rio- gritó Eli alegre



Esas palabras produjeron un sentimiento de alegría y alivio a Anna que le permitió extraer sus reservas de energía para seguir adelante



En dos minutos llegaron al río y un nuevo interrogante- problemón salió a flote, ¿Cómo coño iban a pasar a la otra orilla?

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